No sé porqué te hecho de menos… Después de mucho llorar y sentirme culpable por dejarte marchar y no ir contigo me doy cuenta de que no era yo quien tenía que pedir perdón, aunque lo hice.
No sé porqué te hecho de menos… Si aun cuando te llamo espero un poco de cariño, de ternura y un beso de despedida (ni siquiera un te quiero) y lo único que recibo son palos verbales.
Me dije a mí misma que no te dedicaría ninguna línea en este pequeño espacio, pero hoy al colgarte el teléfono, sentí que debía desahogarme de alguna manera. Limpiarme todo ese veneno que me escupiste con tu indiferencia y curarme de nuevo la herida que creí cerrada hace tiempo.
Parece mentira que catorce años juntas no hallan servido para retenerte, aunque fuera un poco, a mi lado. Pensé que al irte tan rápido, te habrías dejado algo y volverías a por ello… pensé que esa cosa era yo, y que volverías a buscarme… supuse que te sería tan difícil como a mi estar lejos de ti, pero al ver que pasaban los meses y no llamabas comprendí que catorce años juntas para ti, NO SON NADA.
Sé que no podré cumplirlo, porque todavía me dueles muy dentro, pero prometo que intentaré no volver a llorar cuando tu nombre, tu imagen o aquella canción ronden por mi mente. Aquí acaba mi sufrimiento por ti, supongo que ya no te hago falta, o que nunca te la hice, por eso ahora me toca vivir a mí sin volver la vista atrás.
No sé porqué te hecho de menos… Si aun cuando te llamo espero un poco de cariño, de ternura y un beso de despedida (ni siquiera un te quiero) y lo único que recibo son palos verbales.
Me dije a mí misma que no te dedicaría ninguna línea en este pequeño espacio, pero hoy al colgarte el teléfono, sentí que debía desahogarme de alguna manera. Limpiarme todo ese veneno que me escupiste con tu indiferencia y curarme de nuevo la herida que creí cerrada hace tiempo.
Parece mentira que catorce años juntas no hallan servido para retenerte, aunque fuera un poco, a mi lado. Pensé que al irte tan rápido, te habrías dejado algo y volverías a por ello… pensé que esa cosa era yo, y que volverías a buscarme… supuse que te sería tan difícil como a mi estar lejos de ti, pero al ver que pasaban los meses y no llamabas comprendí que catorce años juntas para ti, NO SON NADA.
Sé que no podré cumplirlo, porque todavía me dueles muy dentro, pero prometo que intentaré no volver a llorar cuando tu nombre, tu imagen o aquella canción ronden por mi mente. Aquí acaba mi sufrimiento por ti, supongo que ya no te hago falta, o que nunca te la hice, por eso ahora me toca vivir a mí sin volver la vista atrás.
1 comentario:
Creo que ya te dije alguna vez que solo aquellos que tenemos cerca y se preocupan por nosotros son los que realmente merecen la pena.
Intenta no mirar atrás, aunque sé que es dificil y a veces cuesta, pero.. creeme, al final no es que acabas olvidando, es que, acabas ignorando..
Cielo, no estás sola, y creo, que aunque sean pocos, los que estamos a tu alrededor somos los que realmente te queremos, los demás.. como ya te dije, pasajeros.
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